1. La corrupción pública en Colombia.

Actualizado: 19 may 2021

Según la Real Academia Española (RAE), el término corrupción se define como

“Acción y efecto de corromper o corromperse.”

Ahora bien, como nos indica el título del blog, nos encontramos aquí para conocer y discutir un poco sobre la corrupción pública en Colombia. Un problema social de suma importancia para todos los que habitamos esta bella tierra, y donde todos también, somos víctimas de esta situación gracias a que afecta casi todos, por no decir todos, los aspectos de nuestro bienestar como sociedad, pero de esto hablaremos más adelante.

Así que, volviendo a lo que nos dice la Real Academia Española (RAE), tenemos que la palabra corrupción es también

“En las organizaciones, especialmente en las públicas, práctica consistente en

la utilización de las funciones y medios de aquellas en provecho,

económico o de otra índole, de sus gestores.”

En otras palabras, puede considerarse como un abuso de poder para un beneficio propio, que no sólo aplica en la política, ya que esta empieza desde el momento en que aprovechas una situación para un beneficio propio, a pesar de ser consciente de que estás afectando a alguien a tu alrededor.

Por ejemplo: vas por la calle y encuentras dinero envuelto en un recibo de luz, pero envés de buscar a su dueño/a, o quien quita, hacerle el favor de pagar el recibo y evitar que le corten el servicio, piensas: “Ah no, ya aquí coroné, esta plática me la quedo yo” e irte feliz a gastarlo en cervezas o lo que sea. A lo mejor te puede causar risa esta situación, pero es justo en un pensamiento y acción como este donde la corrupción empieza.

Y es que la corrupción no es solo el político que roba, o los recursos que nunca llegan, la corrupción es dinámica y existe en muchos aspectos de la vida, y esta puede verse desde una escala micro y una macro.

Donde la primera, como su nombre lo indica, corresponde a lo que son actos pequeños de corrupción, mientras la segunda es lo contrario, tratándose de acciones realmente grandes, que como nos indica transparencia por Colombia

“consiste en actos cometidos en los niveles más altos del gobierno que involucran la distorsión de políticas o de funciones centrales del Estado, y que permiten a los líderes beneficiarse a expensas del bien común”

Ya teniendo claro el concepto de corrupción, y con una idea más clara de todo lo que este conlleva, es importante reconocer que la gran escala del mismo se especializa más en el ámbito público, que es el tema principal de este blog, ya que esta clase de corrupción sucede cuando las personas que administran el estado abusan del poder, utilizando los bienes del pueblo para un uso inapropiado.

Y es que existen muchos tipos de corrupción, sin embargo a continuación les hablaremos sobre el ámbito político, que parte desde el Estado y los funcionarios públicos que trabajan ahí, hasta las grandes figuras que vemos a cada rato en televisión y que supuestamente nos dirigen como país para el próspero desarrollo y bienestar de todos, políticos que con estos actos de corrupción que cometen, dejan expuesta su inmoralidad y su falta de valores como personas, y como líderes de los ciudadanos.

También hablaremos un poco sobre lo que nosotros, personas del común, podemos hacer para apaciguar el gran impacto de este problema en nuestra sociedad, a través de algo tan simple como la educación, la moralidad y los valores, herramientas fundamentales para evitar el avance de la verdadera pandemia que azota el país. Lo cual nos da la oportunidad como sociedad, de confrontarnos a esta horrible situación que lastimosamente hemos normalizado.

Así que es hora de tener claros nuestros principios y valores, pero también nuestros derechos como ciudadanos y las herramientas que nos brindan ciertas instituciones, para prevenir y quizás algún día poder detener los casos de corrupción que lastimosamente vemos a diario y que causan decepción, impotencia y desconfianza en todos nosotros. Ya que si bien no es fácil afrontar la corrupción, porque si lo fuera probablemente este blog no existiría y la vida en serio fuera color de rosa, si hay acciones por hacer y cosas que podemos cambiar, por imposible que parezca. Porque sí, tenemos que

“...La corrupción es un problema generalizado en Colombia, que cuesta a los colombianos 50 billones de pesos, o 18.400 millones de dólares, cada año y Fernando Carrillo, procurador general de Colombia, calificó este delito como una "pandemia" que roba al país el 5% de su producto interior bruto y el 15% del presupuesto del Estado, y afecta al 18% de la contratación pública de la región a través de sobornos y coimas, según declaró ante la Asamblea de las Naciones Unidas en mayo de 2018”. CNN en Español, 2018

Un panorama para nada lindo siendo sinceros, pero que puede mejorar aunque sea de a poquito, formando a las personas para que estén atentas frente a estos sucesos y haciéndoles saber que existen maneras directas de responder ante estos casos para que los entes o personas involucradas tengan sus respectivas sanciones y se frene poco a poco el crecimiento y proliferación de una sociedad corrupta, pero este es un tema para el que tendrán que estar pendientes de los próximos blogs, mientras sigamos con el tema de hoy y el panorama al cual nos enfrentamos, esta vez de manera más local.

“...EL HERALDO publicó una noticia basada en un estudio del Monitor Ciudadano de Transparencia por Colombia, según la cual la Costa Caribe produjo los mayores hechos de corrupción entre enero de 2016 y julio de 2018. En ese lapso, 46 medios periodísticos reportaron 327 casos de corrupción a nivel nacional, y el 34% sucedieron en nuestra región. En el país, el 73% de los casos fueron por corrupción en alcaldías y gobernaciones, el 9% por corrupción privada y el 7% por corrupción judicial.”

Teniendo en cuenta todo lo visto hasta ahora, nuestros objetivos al realizar este blog son los siguientes:

Contribuir a la recuperación de la moralidad y los valores de las personas.
Ayudar al desarrollo de la igualdad social.
Informar a las personas los derechos que tienen como ciudadanos para que puedan combatir mejor la corrupción pública.
Proponer sanciones estrictas para las personas que cometen actos de corrupción.

Siempre manteniendo como objetivo general:

Mostrar a las personas la manera de combatir la corrupción para obtener una mejor sociedad.

Donde en este primer blog, tenemos una relación amplia entre el primer objetivo y la corrupción, ya que se habla de la falta de moralidad y valores como una de las causas de este problema, así que llegó la hora de ampliar este tema.

Primero que todo y al igual que al principio de este blog, debemos comenzar informándonos acerca de la moralidad y los valores. Así que de nuevo, según la RAE, tenemos que la moral se define como

“Perteneciente o relativo a las acciones o caracteres de las personas,

desde el punto de vista de la bondad o malicia.”

De donde podemos inferir que la moralidad es algo que indica el respeto y el acatamiento de las normas y leyes de una comunidad, concepto claramente ignorado por los políticos e instituciones corruptas del país, sobre todo los políticos que a cada rato nos meten gato por liebre y que como nos cuenta Rojas, D

“... con sus discursos demagogos cada cuatro años nos dicen que han de erradicar la pobreza, el empleo y que veremos un mejor país… pero no deja de pasar unos meses y todo queda en el olvido.”

pero bueno, sigamos, porque ya está más que claro que moral acá no existe, puesto que esta se desvanece con cada mentira dicha a la comunidad y con cada una de las falsas promesas que hacen, ¿y todo para qué? para ser elegidos, aunque la peor parte sin duda es que lo logran, pero ese ya es otro cuento.

Mientras, el descaro reina en ellos, ya que incluso prometen acabar totalmente con la corrupción, y es que ni los que escribimos este blog nos atrevimos a tanto, y eso que acá hay nota de por medio.

Pero continuando con lo que veníamos, es hora de definir qué son los valores, que según la RAE, se refiere a la

“Persona que posee o a la que se le atribuyen cualidades

positivas para desarrollar una determinada actividad.”

¿Pero cualidades cómo cuales? se preguntarán, y bueno aunque existen muchas, las básicas y más para este tipo de cargos y para un líder político son, la honestidad, humildad, tolerancia, respeto, solidaridad, empatía, lealtad y confianza, entre algunas más, puesto que son de suma importancia para el desarrollo de una persona y de toda una comunidad, ya que los valores mencionados anteriormente nos ayudan a vivir en una sociedad pacífica. Pero como siempre, la realidad y como dice Rubín, A

“Se puede dar el caso de que alguna persona no tenga ningún valor positivo y deseable por la sociedad. En este caso sería una persona con antivalores. Por ejemplo, podría ser alguien que cree que es importante mentir (antivalor de sinceridad), dañar a los demás (antivalor de sinceridad) y faltar el respeto (antivalor de respetar).”

Palabras que definen bastante bien a los que están en el poder.

Así que a manera de conclusión y casi que de regaño, ni crean que estos valores deberían solo tenerlos nuestros líderes políticos, porque si en realidad queremos acabar este problema, o al menos disminuirlo, y generar un cambio en nuestra sociedad, es fundamental que todos seamos conscientes de su importancia e impacto a nuestro entorno. La moralidad y los valores son importantes, lo suficiente para ser una causa de la corrupción, ya que como se dijo anteriormente si nuestro líderes no tienen estos valores positivos nunca van a actuar por el bien de la comunidad sino por el bien de ellos mismos.

Y si nuestro objetivo es contribuir a la recuperación de la moralidad y los valores de las personas, lo que tenemos que hacer es mantenernos firmes en nuestros principios, mostrarles que no vamos a seguir normalizando sus actos de corrupción, que no los toleramos más y que esa no es la forma de hacer política.

Llegó también el momento de dar ejemplo a las próximas generaciones de cómo debemos comportarnos como sociedad, de mostrarles y de ver nosotros también los beneficios de llevar una vida llena de valores, donde no actuemos solo por el bien individual, y de mostrarles que ser bueno, aunque suene algo cliché y utópico, tiene sus beneficios, como lo son que todos estos valores van a permitirte tener un punto de inicio para poder determinar cuales son las prioridades que tienes en tu vida, también te ayudarán para conocerte a ti mismo, poder vivir en armonía, con integridad, que puedas tomar buenas decisiones y por consiguiente actuar de manera correcta, lo que influye en tu vida y en tu entorno de manera positiva, brindando una mejor manera de ver las cosas y cambiando la perspectiva que tienes sobre el mundo.

Y también que una moral bien fundamentada te ayuda al momento de tomar una decisión, ya que sabrás que es lo mejor no sólo para ti, sino lo mejor para el mundo que te rodea.

Sabrás identificar el bien del mal y, habrá más respeto entre los ciudadanos y estarás conforme contigo mismo. Lo que eventualmente, ayudará a que todos vivamos en una sociedad mejor.

Por cierto, si eres un funcionario público o político, debes saber que esto será de gran beneficio para ti, ya que el pueblo estará contento y por ende no tendrás tantos problemas ni tu nombre se verá manchado en ningún aspecto, es probable que muchas personas incluso querrán que vuelvas a postularse al mandato. Pero también ten en cuenta tu realización como persona y como profesional.